martes, 4 de junio de 2013


Hubo un tiempo en el que esto se me daba mejor. Cuando tu sonrisa diaria estaba asegurada y tu felicidad ocasional me la ganaba con cada tontería.
No sé cuánto tiempo he estado esperando por esto, o cómo voy a hacer para sacarte una sonrisa. No sé ni si quiera si soy la más indicada para hacerlo.
Sabes lo mucho que odio verte mal, lo odio más que verte fingir. Y sabes lo mucho que me gusta que le enseñes tu sonrisa al mundo. No deberías dejar de hacerlo, por muy mal que vayan las cosas. Tampoco deberías esconderte, ni dejar que todo se caiga a pedazos. Sé que cuesta, que te cuesta, pero las dos sabemos lo fuerte que eres. No me he olvidado de lo fuerte que me pegabas por alguna tontería, ni de tus enfados. 
Puedes con esto y más, y lo sabes.
No podrás esconderte por mucho más tiempo, como ya te dije: o sales, o te sacan.
Y si decides salir, hazlo con una sonrisa, no lo olvides: Siempre con una sonrisa, Julieta.